¡Vuela alto y libre, mi Tita!

¡Vuela alto y libre, mi Tita!

Fui a la feria del agricultor y la sentí a mi lado. No físicamente, como hace 17 años, cuando todos los sábados en la mañana teníamos una cita entre piñas, cebollas y tomates, pero sí sentí la presencia de su espíritu en la forma del viento que refrescaba el lugar. La...